Conte de la Bugadera de Carrancà explicada a la classe de primer from Antoni Petit on Vimeo.
domingo, 31 de julio de 2011
LA CARMELA
lunes, 25 de julio de 2011
SOLEDAD PEZA
Pasó por la vida del poeta otra mujer nunca mencionada
por nombre en sus obras. Al parecer, ella no fue ni
una pasión ni un adecuado tema lírico, aunque ella si
sintió un cariño profundo o, a lo menos, respeto y devoción.
Una lavandera que frecuentó la Escuela, siempre llevando su
canasto de ropa lavada o por lavar, se llamó Soledad y Peza
dice que no sabia porque Manuel la decía Celi: "Acuña en
sus ideales, en su amor lírico, no fijó nunca sus ojos en
los negros y brillantes de Celi, que la miraba con tenura y
respeto .
Varias crónicas se han escrito refiriendo a un hijo
de Manuel y Celi. Dos aparecieron en El Heraldo del Norte.
Xavier Serondo afirmó que conoció a la dicha lavandera,
llamada Celedonia, " ... lo que daría la clave que no encontró
Peza, de porque Acuña la llamaba Celi". También
declaro que "el chiquillo había muerto por los días en que
escribió Acuña 'Nocturno"
'". Xavier Pardo escribió:
"Se sabe que el mismo día en que le enterraron [a Acuña) , enterraron
a su hijo. Su primer y único hijo. La mujer en
quien lo tuvo, lavandera por entonces, le sobrevivió muchos
años.
Tratando de verificar estas citas. Castillo
Nájera descubrió que los autores ni recordaban donde consiguieron
sus datos ni conocían a la dicha mujer. Así, otra
vez se encuentran ficciones en estas crónicas del hijo de
Celi y Manuel.
Otra narración de Peza relata que después de la
muerte del poeta, Soledad costeó un monumento de piedra con
una cruz gótica de hierro y con el nombre del poeta en
letras de oro cosa que a ninguno de sus amigos le había
ocurrido.
NOCTURNO
I
¡Pues bien! yo necesito
II
Yo quiero que tu sepas
III
De noche, cuando pongo
IV
Comprendo que tus besos
V
A veces pienso en darte
VI
Y luego que ya estaba
VII
¡Qué hermoso hubiera sido
VIII
¡Figúrate qué hermosas
IX
¡Bien sabe Dios que ese era mi mas hermoso sueño,
X
Esa era mi esperanza...mas ya que a sus fulgores
LAVADERO,ESPACIO PUBLICO
EL LAVADO
José Miguel de Barandiaran explica la técnica de lavado que realizaban las mujeres en
H a s p a rren, y concretamente en Dohozti .También en Liguiaga era similar.
.." La tarea de lavar la ropa en Dohozti la llaman “boketa" y se realiza unas seis veces al año. Incluyen la ropa blanca de la casa y la ropa interior de los miembros de la familia. Para ello utilizan un gran recipiente que llaman “kuba”, es como un barril de madera y su base inferior está abierta. En este barril introducen la ropa y la cubren con un gran trozo de tela blanca que llaman “oyal”. Encima de esta tela extienden una capa espesa de ceniza de la chimenea y comienzan a cocer la colada. Vierten encima agua muy caliente que se va filtrando poco a poco y va saliendo por la parte inferior del barril. El agua que se va filtrando se recoge bajo el barril en un recipiente que llaman “bertz”. Este agua recogida es recalentada y vuelta a verter sobre las cenizas. Esta operación se va repitiendo una y otra vez hasta que el agua que se recoge sale igual de caliente que cuando la vierten. Es en este momento cuando la colada está cocida. Entonces la sacan y la llevan al río para realizar el lavado propiamente dicho.""...
Lavaderos: espacio público,
genérico, de trabajo, de relaciones
interpersonales. Cambios acaecidos.
Guipúzcoa 1850-1950
( Washing places: public spaces, generic spaces, work
places, places of interpersonal relationships. Changes.
Gipuzkoa 1850-1950)
Manrique Sáez, Mª Pilar; Alberdi Erice, Mari José
U n i v. del País Va s c o
Esc. Univ. de Enferm e r í a
Paseo Dr. Beguiristain 105
20014 Donostia